Hay una cantidad enorme de componentes que pueden ser aprovechados de equipos quemados, entre ellos los transistores de potencia. Vea cómo utilizar uno de estos componentes en un experimento tradicional de electroquímica.
No siempre la quema de un transistor de potencia significa que está completamente inutilizado.
En algunos casos, una de sus dos uniones puede permanecer intacta y funcionará como un diodo, como se muestra en la figura 1.
Si probamos un transistor de potencia con un multímetro y constatamos que una unión es buena, es decir, baja resistencia en un sentido y alta en el opuesto, se puede utilizar como un diodo.
En la figura 2 mostramos cómo hacer esta prueba usando dos pilas, una resistencia y un LED.
Así, podemos aprovechar esta unión y montar una pequeña fuente para electrólisis, como muestra la figura 3.
El transformador puede ser cualquier tipo pequeño que tenga tensiones de 5 a 9 V de secundaria con cadenas de 100 mA a 500 mA.
El montaje de la fuente con el conjunto preparado para la electrólisis se muestra en la figura 4.
La solución en que están los hilos pelados está formada por ácido sulfúrico diluido en agua.
La resistencia debe ser de alambre con al menos 1 W de disipación.
Conecte el aparato a la toma y observe el hidrógeno y el oxígeno burbujeando en los tubos de ensayo, resultantes de la descomposición del agua.
El mismo arreglo puede ser usado en un experimento de la galvanoplastia y con el uso de un condensador de filtro, la fuente podrá alimentar circuitos electrónicos sencillos que no requieran tensión regulada.
La capacidad de corriente dependerá del transistor quedando típicamente alrededor de 500 mA para los tipos con envoltorios metálicos, como los mostrados en las ilustraciones.
Q1 - transistores quemados - ver texto
T1 - Transformador - ver texto
R1 - 47 ohms - resistor de 1 W o más - ver texto
S1 - Interruptor simple
F1 - fusible de 1 A
Varios:
Puente de terminales, cable de fuerza, soporte para el fusible, material para la electrólisis, soldadura, hilos, etc.