"Creo que los vehículos eléctricos no deberían ponerse de moda en los próximos años, ya que habrá mucha presión por parte de la industria petrolera".
Hay que tener en cuenta que se acabará el petróleo. Los depósitos no son eternos, por lo que llegará un momento en que su precio se volverá absurdo como combustible. Así, la llegada del coche eléctrico (VE) es una salida para mantener la venta de petróleo, pero aplicada a otro propósito: materia prima. Posteriormente, el aceite se utilizará en la fabricación de plástico, asfalto, parafinas, etc.