"Compré en Europa un aparato que utiliza un motor de 50 Hz en 220 V. En mi país, al encenderlo noté que perdió la potencia. ¿Qué debo hacer?"
En muchos aparatos electrónicos más simples, que no hacen uso de motores o aún no dependen de la frecuencia para funcionar, el cambio de 50 Hz a 60 Hz de nuestra red de energía tiene poco efecto sobre el funcionamiento. Sin embargo, en el caso de motores esto puede ser más crítico. Los motores se fabrican ya previendo la frecuencia de la red en la que debe funcionar. Su rotación y potencia se calcula en función de ello. Así, cuando se conectan a diferentes frecuencias, se producen problemas como, por ejemplo, la rotación y la potencia. En estos casos, no hay que hacer, pues el motor debe ser cambiado.