Los captadores telefónicos son bobinas que, colocadas junto a un auricular (desde que sea del tipo magnético) captan los sonidos y los transfieren a un amplificador. Como la señal capotada es débil es necesario haber una buena preamplificación, lo que se logra con el circuito abajo. Como el consumo es bajo, puede ser alimentado por una pequeña batería. En el caso de teléfonos con auriculares piezoeléctricos, se consigue algún efecto colocando el captador cerca de la línea. El primer transistor BC548 puede ser sustituido por un BC549 de mayor ganancia. La entrada de señal del captador debe realizarse con un cable blindado.